Anne: Un abogado que cualquiera agradecería tener.
Tuve un caso de inmigración muy difícil basado en el estado de asilo. Ya había conocido a dos abogados de inmigración que me habían dicho que perderíamos el caso. Ella era mi última oportunidad.
El caso no fue fácil primero debido a la falta de documentación, en segundo lugar, mi testimonio se basó en el de mi familia que estaba en casa. En tercer lugar, tuve un requisito de inmigración de regreso a casa por dos años.
La Sra. LaFontaine mostró su honestidad al ser franca conmigo. Ella me mostró mis posibilidades de obtener asilo. Lo aprecié. Me ayudó a equilibrar mis expectativas y tomarlo en serio.
Como estuve en los Estados Unidos durante la guerra en mi país, fue difícil probar daños personales y amenazas. A pesar de que las autoridades de mi país ocultaban la verdad, la Sra. LaFontaine encontró los recursos necesarios para documentar mi caso. Prestó atención a los detalles más pequeños. Ella insistió en la honestidad y requirió toda la evidencia. Hizo su propia investigación y comprobó dos veces cada afirmación.
Mi caso estaba tan bien documentado que fue manejado por los servicios de inmigración en menos de un mes. Además, la dramática situación de mi familia estaba tan bien representada que el oficial de inmigración me aconsejó que me apresurara y salvara a mi familia.